Fascitis plantar

Llega el buen tiempo y, siento desilusionaros, pero con él las temidas fascitis plantares.

La fascia plantar es una banda de tejido conectivo, gruesa, que va desde el hueso calcáneo (talón) a la zona metatarsal (debajo de los dedos). Entre sus funciones podemos destacar su papel fundamental en el mantenimiento del arco plantar, además, absorbe y devuelve la energía que se produce cuando el pie impacta en el suelo y es la responsable de la protección de los metatarsianos, evitando un exceso de flexión dorsal de los dedos.

Viendo estas funciones podemos entender la importancia de esta estructura en la estática y dinámica del pie, así como su gran influencia en la postura del individuo.

La fascitis plantar es la inflamación de esta estructura por distintas causas, y es, en muchas ocasiones, la responsable de dolor en la zona del talón. Este dolor suele agravarse por las mañanas cuando nos levantamos de la cama ya que, en este momento, al echar el peso sobre los pies, la fascia, que ha estado toda la noche en reposo, debe estirarse y esto es doloroso debido a la inflamación. Tras caminar un poco suele disminuir la molestia. En el caso de deportistas, en fases iniciales, suele doler por las mañanas y tras la práctica deportiva.

Es muy importante que sepamos reconocer los síntomas y acudir al especialista lo antes posible para que no llegue a fases más tardías en las que el dolor se agudiza y se vuelve continuo a lo largo de todo el día.

Quitando el caso de deportistas, en los que la incidencia está muy igualada entre hombres y mujeres, en general es más común entre el sexo femenino y se relaciona con un acortamiento del tendón de Aquiles, en muchos casos, provocado por el uso de calzado con tacón. En estos casos es importante bajar el tamaño del tacón, pero de una forma muy progresiva ya que si lo hiciésemos de forma brusca la fascia también sufriría.

Existen muchos factores influyentes a la hora de padecer esta lesión como, por ejemplo, tener de base problemas en la planta del pie (pie plano o cavo), determinadas prácticas deportivas (correr por terreno desigual) o cambios bruscos de peso, por ejemplo, durante el embarazo o la obesidad ya que afectan directamente a la estabilidad del arco plantar. El gemelo afecta directamente a un hueso llamado calcáneo (talón) que está estrechamente unido con la fascia plantar por lo que tensiones en gemelos, se traducen en tensiones en esta estructura, este seria el caso del uso continuado de tacones explicado anteriormente. Y por último y muy importante, otro factor a tener en cuenta seria un cambio de actividad , como por ejemplo el cambio de calzado estacional.

Por mi experiencia puedo afirmar que aumentan los casos de fascitis plantar en estos meses. Por supuesto que hay otras causas, pero el cambio de calzado es determinante para muchas de estas dolencias. Con el buen tiempo cambiamos de calzado, pasando a zapatos más abiertos y por lo general menos estables, que sujetan menos que las botas o zapatos cerrados de invierno. Esto quiere decir que nuestro cuerpo debe adaptarse a esta nueva situación.

Normalmente el calzado de verano tiene suelas muy finas y con muy poca amortiguación. Todo esto provoca que nuestros músculos de la pantorrilla (gemelos, peroneos y tibiales) se tensen, y con ello provoquen cambios en la biomecánica del pie y de la pisada.

¿Como solucionamos una fascitis plantar?

Hay dos profesionales que a mi parecer son clave en este proceso: un podólogo que haga un buen estudio de la pisada y un fisioterapeuta. Lo ideal es hacer un trabajo conjunto.

Como fisioterapeuta voy a hablar de la parte que me compete.

Primero y muy importante debemos buscar el origen de esta lesión, y si es un mal calzado suprimirlo.

Y entonces nos ponemos “manos a la masa” Y empezamos nuestro tratamiento que consistirá en:

-trabajar la musculatura afectada.

-devolver la biomecánica natural del pie y tobillo eliminando posibles bloqueos articulares.

-bajar inflamación.

-una vez resuelta la inflamación, trabajar la musculatura para devolverle su tono y fuerza normales.

-por último, trabajo propioceptivo para devolver al pie su capacidad de respuesta a estímulos.

En resumen:

-elegid muy bien el calzado veraniego, dándole importancia a la sujeción y a la suela.

-si sentís algún dolor en la planta del pie acudid a un profesional que pueda guiaros y no lo dejéis para mañana, cuanto antes se trata una lesión más fácil es resolverla.

Como ya os he dicho hay otros muchos factores que pueden provocar una tendinitis, pero de eso hablaremos más adelante.